martes, 10 de abril de 2018

COMER POR COMER

¿Realmente tienes hambre?. ¿O es que estás aburrido?.

Creo que a todos nos ha pasado alguna vez, que estamos en casa, aburridos, sin hacer nada y lo que hacemos es ir a la cocina y pillar lo primero que vemos. GRAVE ERROR.

Eso nos hará comer porquerías, comer mal y seguro que comemos más de lo que necesitamos (patatas, chuches, cola...)...
En otras ocasiones puede aparecer ansiedad, estrés, preocupaciones, que hacen que te refugies en la comida para sentirte así aliviado (aunque sea por un rato).

Hay gente que depende totalmente de la comida para satisfacer sus necesidades emocionales.
Comer sin hambre, solamente por vicio, es un mal hábito, y nos hace cometer múltiples errores.

"Hay que comer para vivir, y no vivir para comer" _ Moliére.

¿Por qué sientes alivio cuando comes?.
Pues porque cuando saboreas la comida, tu cerebro secreta varias sustancias poderosas que producen placer (dopamina).Y ¿a quién no le gusta sentirse bien?.
Tu cerebro va a buscar esa sensación tan placentera haciéndote creer que tienes hambre, aunque en realidad no sea así.

Cuando te sientas así, primero cálmate, para y piensa. ¿Realmente tengo hambre?.

No te culpes, ni te juzgues. Nada de culpas. Si realmente necesitas comer, opta por algo de fruta o verduras (depende de la hora que sea), o simplemente bebe agua. Te calmará.
Sólo si esperas unos minutos, te darás cuenta si es simple capricho, antojo o aburrimiento.

Así que ya sabes. Cuando notes que estás angustiado, estresado o simplemente aburrido, ten en cuenta que es cuando más vas a querer atracar tu frigorífico.
CONTROLA ESAS EMOCIONES. TU CUERPO TE LO AGRADECERÁ.



Espero que os ayuden estos consejillos.
Hasta pronto amigos. Aquí seguiré investigando.




No hay comentarios:

Publicar un comentario